En Bogotá, Colombia, Cuidadores de la Casa Común participó en la Plataforma de Economía del Centro de Programas y Redes de acción pastoral de la CELAM, un espacio que reunió a representantes de Perú, Venezuela, Brasil, Chile, Paraguay, México y Colombia. Durante tres días, las banderas de nuestros pueblos ondearon juntas con un propósito común: construir una economía justa, inclusiva y solidaria, escuchando el grito de los pobres y de la tierra, como nos pide el Papa Francisco.
El encuentro tuvo como eje compartir experiencias y buenas prácticas que inspiren y motiven el cambio. Fortaleciendo las redes y alianzas entre los diferentes actores que trabajan por un futuro más justo y equitativo, si fuera posible, definir estrategias conjuntas para promover iniciativas de una economía justa, humana, integral, de paz, de los pueblos, territorial, diversa e incluyente.

Al finalizar el encuentro, se les pidió a los participantes mencionar una palabra que le dirian a sus compañeros a su regreso, nuestra representante, Clara Vernet, nos compartió:
«La palabra que se me presenta con fuerza en este momento de cierre y evaluacion es agradecimiento. Cuidadores es un movimiento con acción en Argentina. Y hoy nuestro país está pasando un momento de mucha oscuridad para los que soñamos que debe haber buen vivir en nuestros pueblos. Techo, tierra, trabajo y comunidad. Que esta asamblea nos abrace, y en ella Latinoamérica y el Caribe, está Patria Grande que tanto soñamos, en este tiempo de soledad, nos conmueve profundamente. Nos da esperanza. Y la esperanza es nuestro motor. Sin esperanza nada.«
Clara recordó las palabras de Gabriel García Márquez en su discurso «La soledad de América Latina» y renovó el compromiso de Cuidadores de seguir construyendo, desde Argentina, nuevas economías que sean faros de dignidad y vida para todos.
Al cierre del evento, nuestra compañera concluyó emocionada: «Regreso a casa sabiendo que no estamos solos. Juntos podemos seguir soñando y trabajando por esa segunda oportunidad para las estirpes condenadas a cien años de soledad.»
Cuidadores agradece profundamente este espacio y la posibilidad de seguir tejiendo redes por un mundo más humano y justo.